El arte del maridaje con vino: qué es, nociones básicas y algún consejo

El maridaje es, como tal, un arte. Lo ideal es que lo organice un sommelier que conozca tanto el producto que va a ser maridado como los vinos elegidos para la cata, para que pueda orquestar la combinación perfecta entre ambos. 

A la hora de hablar del maridaje hay que tener algunos aspectos en cuenta. Lo primero, no existe una única combinación posible, y eso es algo que lo hace más complejo y especial. La infinita variedad de vinos que existen, sumado al tampoco limitado número de platos que se pueden preparar, hace que el número de combinaciones esté siempre abierto. 

La figura del sommelier en una cata compleja es indispensable, porque conoce el producto profundamente y esto le permite elegir combinaciones acertadas y que encajen como piezas de puzzle. 

En este artículo queremos hablaros de algunas nociones básicas sobre el maridaje, daros alguna idea para que podáis empezar a crear vuestras propias piezas de puzzle y algún consejo extra. 

Nociones básicas del maridaje 

Como hemos dicho antes, es importante recordar que: no hay respuestas ni combinaciones únicas. Esto es importante porque es común escuchar “el blanco para el marisco y con la carne con tinto” como si fuera una verdad universal, pero no siempre tiene por qué ser así. 

Antes de empezar con algunas posibles combinaciones que suelen acertar bastante bien, nos gustaría presentaros los diferentes factores que intervienen a la hora de realizar un maridaje, tanto por la parte del vino como de la comida:

• Sabor: dulce, amargo, ácido y salado
• Sensaciones: textura, picante…
• Temperatura
•  Aromas percibidos 

Todos estos aspectos son los que se deben tener en cuenta a la hora de establecer una relación entre vino y comida. 

Antes de empezar con las recomendaciones generales de maridajes, os recordamos que todas las fichas de nuestros vinos en la web incluyen un pequeño apartado de recomendaciones de maridaje para cada uno. Anímate a probarlos y descubrir qué te provocan estas combinaciones.  

Maridar con vinos blancos 

Sobre las combinaciones de vinos blancos, lo primero es perderles el miedo. Los tenemos reservados para el pescado y los mariscos y, aunque en parte es un acierto porque suelen encajar muy bien con este tipo de comidas, también sirven para otro tipo de platos. Los vinos blancos con toques ácidos combinarán bien con comidas grasas. 

• Vinos blancos jóvenes y sencillos: para aperitivos o entrantes
• Vinos blancos más complejos, pero jóvenes: pescados blancos, mariscos, ensaladas… 
• Vinos blancos fermentados en barrica: quesos curados, ahumados, carnes blancas, arroces...

Maridar con vinos tintos

En cuanto a los tintos, es importante tener en cuenta que un vino con mucha graduación alcohólica tapará y robará protagonismo a determinados sabores, por eso se recomienda utilizar con comidas fuertes como carnes, guisos, etc. Un vino tánico combinará mejor, por lo general, como comidas grasas y con alto valor proteico. 

• Vinos tintos jóvenes: ibéricos, pescado azul, alguna carne roja asada, pescados en salsa…
• Vinos tintos de crianza: carne a la brasa, guisos, asados… 
• Vinos tintos Reserva y Gran Reserva: platos de caza, guisos más elaborados…

Rosados, cavas y dulces

Más allá del blanco y del tinto, no podemos olvidarnos de los rosados, los cavas y los dulces. Estos tres tipos de vino son fantásticos compañeros de multitud de platos y, al ser menos conocidos los posibles maridajes, sorprenderán mucho más. 

Los vinos rosados son una buena elección para pastas, arroces, quesos suaves y verduras.  

Los cavas son tantos que necesitaríamos otro blog para abarcarlos. Dentro de los cavas y espumosos tenemos que recordar que los hay con poco tiempo de Crianza y Reserva con un mayor grado de maduración y complejidad. Según nos encontremos con unos u otros, habrá que tener en cuenta lo anterior y elegir el que mejor encaje con la comida elegida. 

Por su parte, los dulces, irán bien con los postres, teniendo en cuenta que reforzará el sabor dulce de ambos, postre y vino. Esto deberemos tenerlo en cuenta para no realizar una combinación demasiado empalagosa. Los dulces también pueden hacer buena pareja con los patés.   

Algunos consejos para realizar tu primer maridaje

Consejos os podríamos dar muchos, pero al final esto es cuestión de probar sabores, descubrir nuevos productos y dejarse llevar por la intuición del paladar y del olfato. Aún así, si estás pensando en preparar tu primer maridaje, te dejamos algún consejo que te pueda servir de ayuda: 

1.  Antes de elegir uno u otro vino para maridar con un plato, asegúrate de tener la oportunidad de probar previamente el vino en cuestión. Es importante tener en mente los sabores, aromas, textura y sensaciones que nos produce el mismo para poder combinarlo de la mejor forma posible con el plato. 
2. De igual forma, tendrás que haber probado también el plato previamente, por los mismos motivos anteriores. 
3. En un maridaje debemos intentar buscar dos cosas: equilibrio y potenciar los sabores. Que los sabores del plato y del vino estén equilibrados, que uno no caiga por encima del otro y se pierdan matices. Y que ambos se ayuden a potenciarse mutuamente. Este sería el resultado final deseado. 
4. No te agobies, recuerda que lo más importante es disfrutar. Has organizado una cena con amigos, has preparado tu mejor plato… ¡toca disfrutar! Pon esmero en la elección del maridaje, pero no te olvides de disfrutar de los sabores, de la combinación y de la compañía.  

¿Qué te han parecido estos consejos para empezar en el mundo del maridaje con vino? Puedes descubrir todos nuestros vinos en nuestra bodega online y, si quieres que te aconsejemos en la elección de un vino, escríbenos un correo a tienda@sondeuva.com. Un experto en vinos te aconsejará, según tus gustos y preferencias. Te ayudaremos a encontrar el vino que mejor se adapta a lo que estás buscando. 

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