Mimosa
Más allá de tener unas bonitas y llamativas pequeñas flores amarillas o de desprender un penetrante perfume cuando florecen a finales de invierno, las mimosas representan la energía femenina y la amistad. Por eso se han convertido en el emblema del 8 de marzo, Día de la Mujer desde 1946. El vino Mimosa es una oda a la energía femenina, la belleza y la delicadeza. Está hecho con mimo desde el principio hasta el final, pues las escasas botellas de este godello 100% están pintadas a mano por la propia Ana Gadín. ¡No tirarás la botella por nada del mundo!
Estamos ante un vino procedente de una única parcela de viñedo viejo donde no se emplean pesticidas ni herbicidas. Tras la vendimia, la fermentación se produce en barricas de roble francés usado de 600 l, donde tendrá una crianza de 6 meses antes de ser embotellado.
Al descorcharlo...
A la vista
muestra un tono brillante y un color amarillo limón.
En nariz
predomina la frescura y mineralidad. Nos brinda notas de fruta blanca, fruta de hueso y toques cítricos. Aparecen también notas de infusión y leves recuerdos balsámicos procedentes del paso por madera.
En boca
se percibe como un vino con volumen y peso, con buena acidez, complejo y con persistencia en boca.
Maridaje
Mimosa es un vino que será el acompañante ideal para gran cantidad de platos, pescados blancos, guisos de ave, quesos de pasta blanda, pastas o arroces. Aconsejamos beberlo (¡y saborearlo!) a una temperatura de 9º C a 12º C.
Bodega Atrium Vitis
Para Ana Gadín y Javier Mendoza, Atrium Vitis ha significado volver a los orígenes y profundizar en la tradición vitícola familiar. Así como las cepas hunden sus raíces en el suelo y captan la esencia mineral de los mismos; así como los romanos arraigaron hace más de 2000 años el cultivo de la vid en la zona; así entienden la viticultura este par de bodegueros. Atrium Vitis se traduce como “atrio de la vid” y significa que para Ana y Javier la vid es indispensable y fundamental, el origen, el centro de todo. Y para quien escribe, significa que Atrium Vitis hace sus vinos desde el viñedo. Todo comenzó como un hobby tan apasionante que, al final, hizo que ambos se decidiesen a hacer un cambio de sentido en sus trayectorias profesionales. Ellos se definen como unos locos del vino, enamorados de la tierra y amantes de la singularidad de cada parcela y las vides que habitan en ella. Con todo, son conscientes de que hacer vinos parcelarios en Quiroga con vides en algunos casos casi centenarias es un gran desafío. Pero también son conscientes de la gran oportunidad que les brinda el que sus viñedos cuentan con gran diversidad de suelos al estar enclavados en un Geoparque de la UNESCO “Montañas do Courel”. Lo que unido a un microclima especial, da lugar a vinos tremendamente expresivos.
Mimosa es para ti si…
disfrutas de los pequeños matices y placeres de la vida, así como se disfruta contemplando una obra de arte.