Bodega Anónimas Viticultoras

Anónimas Viticultoras es un proyecto vinícola gallego impulsado por María Falcón y Cristina Yagüe, dos mujeres con una profunda pasión y experiencia en el mundo del vino. María, con raíces familiares en la viticultura, aporta la tradición y el conocimiento ancestral, mientras que Cristina, enóloga e ingeniera agrónoma, contribuye con su visión innovadora y experiencia profesional. Juntas, han creado una bodega que busca resaltar las variedades autóctonas minoritarias de Galicia y acercar la cultura del vino de una manera accesible y cercana.

La historia de Anónimas Viticultoras comenzó en 2014, cuando María y Cristina se conocieron en una cata de vinos y decidieron colaborar en la bodega familiar de María. Su primera creación fue un vino tinto elaborado con la variedad Caíño, una uva autóctona muy apreciada pero poco común. Esta colaboración inicial fue el germen de su proyecto, que se materializó en 2016 con la primera añada de rosado y tinto, ambos elaborados con uva Caíño de una parcela de viñedo muy antiguo de más de 120 años.

Desde entonces, Anónimas Viticultoras ha ido creciendo y expandiéndose, incorporando nuevas variedades de uva y explorando diferentes denominaciones de origen gallegas. En 2017, comenzaron a elaborar vino albariño D.O. Rías Baixas, y en 2018 iniciaron la recuperación de parcelas en la D.O. Ribeira Sacra. En 2021, tras varios ensayos, comenzaron a elaborar vino Godello en la D.O. Valdeorras. Además, han ampliado su línea de vinos con nuevas creaciones como el albariño 3 Invernos y un Mencía monovarietal.

Anónimas Viticultoras es un proyecto dinámico y en constante evolución. María y Cristina están comprometidas con el rural gallego, la preservación del paisaje y la experimentación continua. Su objetivo es elaborar vinos con identidad, que reflejen su zona de origen y pongan en valor la riqueza varietal de Galicia. Además, buscan visibilizar el papel de las mujeres en el mundo del vino y acercar esta cultura a un público más amplio.